Abrió sus puertas como nosocomio para enfermos mentales en junio de 1898 en lo que hasta el año anterior había sido el Balneario de Santa Agueda. El Padre Menni (de la Orden de San Juan de Dios) compró el Balneario -cerrado tras el asesinato de Cánovas del Castillo- y trató de crear un centro en el que dar un mejor trato y atención a los enfermos mentales hasta entonces en las peores condiciones y alejados de la sociedad.